¡¡¡Buenos días estimados bohemios!!!. Esta es mi primera entrada en este blog y siendo sincero estoy bastante nervioso. No sé exactamente como dirigirme a ustedes, y empezando a escribir, cada idea o pensamiento de estructuración que tenía, es abandonada en los recónditos escondites de mi mente para dejar que todo fluya.
En realidad esto será una serie de entradas que compartirán una temática común. Cerrando diciembre, en el Instituto Nacional se organizó un concurso literario por ALCIN (un taller literario de aquel liceo), abierto a los colegios emblemáticos. Creemos que esta oportunidad es interesante para conocer a algunos miembros de las nuevas generaciones de escritores, y por lo mismo vamos a compartir, en primera instancia los primeros lugares. Iniciaremos por la categoría de poesía para luego dar el espacio al microcuento, probablemente después señalaremos algunos de los textos destacados.
El primer lugar de poesía fue conseguido por Marcelo Valle, un estudiante de cuarto medio y curiosamente matemático. El poema enviado por este peculiar sujeto fue titulado como "El lobo estepario".
Él es la latitud
que sincroniza a las
estrellas
al ritmo de una noche
aullada
con sus escamas de sangre
negra.
Yo soy la brújula
que abre de ramaje a
ramaje
los orientes y ponientes
secos de nieve ardiente.
El lobo duerme en las manías
de un sueño estepario.
El lobo cruza en su
hocico
la dentada imagen de la
vorágine
sobre los páramos
salvajes de una estepa
donde ni la frágil muerte
sobrevive.
La estepa
con genes sordos de
inocencia
transmutando su locura
vírica
a través de unos ojos sin
puertas
a un lobo que tiembla
enardecido
en media voz de luna
suprimido.
La estepa
orillada y violenta
que penetra y penetra,
ancha,
doliente,
entre los tejidos del
lobo
a sus pies rendido.
Y allá, cuando se enredan
sus dinastías
la oscuridad de sus
pasados enmudece.
El lobo jamás va a la
estepa;
la estepa se fuga a él y
recrudece.
Pero él alza su lejanía
prisionero del cielo
donde el reflejo de la
estepa estriba.
Y bajo la misma geografía
con su rosa de vientos
marchita
y bajo las mismas alamedas
astrales
agitando sus duros
nervios en la espesura
y bajo el mismo credo de
religión desligada
con la Génesis comenzando
apenas en el Apocalipsis
están el uno apretado
contra la otra.
Ahí
lomo de cánido
lágrima de estepa
latitud que late
brújula que ruge
palidecen los dos sin
verse
ahogados en el tránsito
de la materia
a un mismo tiempo tuerto
que invita a la ceguera.
En la primera estrofa nos plantea una presencia, la presencia de una entidad, el lobo estepario, quien tiene una gran importancia, e incluso me atreveria decir una responsabilidad, es la unión de dos planos, el plano astral y el plano material, cielo y estepa respectivamente. De alguna forma encontramos en esta entidad contaste dicotomias. Es muy interesante como se relacionan el lobo y la estepa. Podemos pensar que los primero acercamientos son metaforicos y unilaterales, de parte del lobo. La estepa en cambio es más real, se presenta práctimente como creadora del lobo, y no solo eso, también lo va consumiendo poco a poco con un caos reinante e ineludible. Este encuentro es casi inconsciente, y el lobo es reacio a repetirlo. Pero el lobo es responsable del cielo, y el cielo es la imagen de la estepa, es el caos armónico. Y poco a poco se funden de forma inevitable, sucumben ante la situación que viven, que esta ligada de forma primigenia. Al final son individuos indivisibles. Para mi este poema es la unión, y al mismo tiempo es la decisión, una decisión casi inexistente, porque el resultado es inexorable, será lo que será, es el destino, y ese destino se presenta sin que sea reconocido. Para mi, este poema ilustra la vida de las personas al estar frente a la adversidad, cuando saben que es responsabilidad de si mismas e intentan hacerle frente, pero al final no hay manera, las cartas ya estan en la mesa.
Ahora los invito bohemios, a dar su reflexión, queremos leerlos, ¿Qué ven ustedes en el lobo estepario?
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